Por todos es sabido que la fruta es uno de los alimentos más sanos y saludables que existen. Por eso, su interminable variedad debería formar parte de la dieta habitual de todo el mundo, y no sólo de los deportistas. El invierno es una época propensa para coger resfriados y otras enfermedades similares debido al frío y a las malas condiciones meteorológicas, y la fruta nos aporta grandes dosis de vitaminas que son muy beneficiosas para que nuestro organismo se proteja de los ataques del exterior. Pero no todas las frutas están en su mejor momento en todas las épocas del año. Estas son algunas de las variedades más típicas de la estación más fría:
-La manzana. Suele estar en su mejor momento de agosto a finales de febrero. Su escaso aporte calórico es ideal para saciar el apetito y el hecho de que tenga pectina ayuda a nuestro organismo a eliminar más fácilmente los residuos.
-La naranja está disponible desde el otoño hasta mediados de primavera. Es una de las variedades de fruta más populares y conocidas, y no sólo por su sabor. Al ser un cítrico, nos aporta grandes cantidades de vitamina C, cuya función antioxidante ayuda a combatir resfriados y a reforzar nuestras defensas. Pero hay más, ya que la naranja facilita la función digestiva, aumenta la quema de grasas y es buena para el hígado porque mejora su función depurativa.
-La mandarina es un cítrico al igual que la naranja y tiene un alto contenido de vitaminas A y C. Además, es rica en potasio y magnesio, lo que contribuye a mejorar nuestra salud.
-La piña tiene un elevado poder diurético, lo que se traduce en la eficaz eliminación de los residuos del organismo. Posee grandes cantidades de fibra, vitaminas y bromelina, cuyaspropiedades antiinflamatorias son muy positivas para la práctica deportiva.
-La uva es otra de las frutas propias del otoño-invierno. Es rica en vitaminas C y B, fructosa y ácido fólico. Todos ellos protegen nuestro organismo y ayudan en la regeneración celular. Además, la uva tiene resveratrol, un componente cuyas funciones antioxidantes ayudan al organismo a mantenerse joven y saludable.
-Finalmente, la pera contiene múltiples vitaminas del grupo B, que regulan el sistema nervioso y el aparato digestivo, fortifican el músculo cardíaco, protegen la piel y el cabello y son esenciales para el crecimiento. También es rica en vitaminas A y C, y contiene minerales como calcio, fósforo, magnesio y potasio. Su alto contenido de fibra mejora la digestión y posee propiedades cicatrizantes, antihemorrágicas y antiinflamatorias.
Cortesia de LANDER RENTERIA.
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